miércoles, 3 de julio de 2019

La cuarta casa, un retrato de Elena Garro





La cuarta casa, un retrato de Elena Garro

LA CUARTA CASA, UN RETRATO DE ELENA GARRO
(La Cuarta Casa, un retrato de Elena Garro, México, 2001, 37 mins.)

Director: José Antonio Cordero. Guión: José Antonio Cordero.  Javier Morón. Música: Iñaki. Edición: José Antonio Cordero, Pieter Bart Kurthius y Juan Fernández. Con: Testimonios: Elena Garro, Helena Paz, Aurora Cano, Pieter Bart Korthius, Ari Brickman. Productor:  Ángeles Casto y Hugo Cordero. Distribuidora: CCC. Clasificación: s/c.


La escritora mexicana Elena Garro regresa a México después de más de veinte años de exilio acompañada por su hija, sus 18 gatos y sus “dos baúles llenos de insultos”, y comienza a buscar una casa. La cuarta casa es un retrato impresionista de esta ilustre mujer construido a partir su memoria portentosa y ácida: su infancia paradisíaca, su matrimonio con el Premio Nobel de Literatura Octavio Paz, lo accidentado de su carrera literaria, el 68, su ruptura con el mundo intelectual, su huida de México, su exilio y su desencantado retorno a las raíces.







Historias de vida - Elena Garro Canal Once


Nació el 11 de diciembre de 1916 en Puebla. Novelista, dramaturga, cuentista, y periodista, estudió coreografía, danza clásica, y actuación en el teatro universitario, así como literatura en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Se inició como periodista en la revista “Así”, en la que entrevistó a Frida Kahlo, Isabela Corona y Lolita González de Riachi, más tarde realizó un reportaje encubierto en la Casa de Orientación de Mujeres, en Coyoacán, llamado “Mujeres perdidas”, sobre el presidio femenil y los abusos hacía las jóvenes adolescentes; su trabajo alcanzó reconocimiento y fama.

Fue defensora de los derechos de los pobres, y de los campesinos despojados de sus tierras, y su crítica contra sus compañeros intelectuales a los que exigía un compromiso a favor de la justicia social, provocó su distanciamiento.

Escribió obras de teatro en un sólo acto, como: “Un hogar sólido”, “Andarse por las ramas”, y “La señora en su balcón”; las narraciones: “Recuerdos del porvenir”, que obtuvo el Premio de Novela Javier Villaurrutia (1963); su colección de cuentos “La semana de colores” (1964), “Andamos huyendo Lola” (1980), y “Testimonios sobre Mariana” (1981), que recibió el Premio de Novela Grijalbo.

Después de la tragedia del movimiento estudiantil, su carrera se detuvo al resultar incriminada como parte del grupo instigador y de organizar un complot que pretendía derrocar al régimen. Durante años Elena Garro vivió en el extranjero, hasta que regresó a México en 1993. Falleció el 22 de agosto de 1988 en Cuernavaca, Morelos.



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Clarice Lispector : Entrevista en español -1977


Clarice Lispector : Entrevista en español 1977






Clarice Lispector nació en Ucrania en 1920 y se naturalizó brasileña. La escritora de origen judío es una referencia obligada para los amantes de la literatura y aquí te explicamos por qué. 

La escritora ucraniana-brasileña Clarice Lispector es considerada una de las más importantes autoras brasileñas del siglo XX.

Nació el 10 de diciembre de 1920 en Chechelnikn, en la época de la Revolución Bolchevique, pero se naturalizó brasileña cuando su familia huía de la persecución a los judíos. Clarice llegó a Recife cuando tenía pocos años de vida. 

Es periodista y escritora de cuentos, novelas, crónicas y obras infantiles. Para Clarice Lispector escribir era una actividad indispensable.

En una oportunidad confesó que escribir para ella “es una maldición porque obliga y arrastra como un vicio penoso del cual es casi imposible librarse, pues nada lo sustituye. Y es una salvación. Salva el alma presa, salva a la persona que se siente inútil, salva el día que se vive y que nunca se entiende a menos que se escriba”.

TeleSUR ahora te da cinco poderosas razones para leer a Clarice Lispector: 

1.- Induce a la introspección
Muchos de sus textos tienen este eje fundamental, que busca transcribir un lenguaje interno y ayuda a avivar la inquietud sobre temas existenciales. 

 “Escribo muy simple y muy desnudo. Por eso hiere”; que exige, sobre todo, claridad y práctica: “No se equivoquen: la sencillez sólo se logra a través del trabajo duro”, explicó. 

2.- Un desafío al lector
Las obras de Clarice Lispector pueden representar un reto a quien decida leerlos, sobre todo para encontrar la trama, algo rápido de hallar en muchos otros textos de diferentes autores. 

“Hay muchas cosas por decir que no sé cómo decir. Faltan las palabras. Pero me niego a inventar otras nuevas: las que existen deben decir lo que se consigue decir y lo que está prohibido”, dijo. 

3.- Una obra diferente
Para la década de 1960, Clarice Lispector tuvo dificultades para publicar sus escritos, mientras estaba en auge el llamado "realismo socialista". Ella era diferente a lo que había en el mercado de la época porque hablaba temas íntimos. 

"No escribo para agradar a nadie”, afirmó en varias oportunidades. 

4.-  Su obra más conocida 
Una de sus obras más conocida fue La pasión según G.H. (1964), un relato sobre la vivencia de una mujer que un día encuentra una cucaracha en el armario del cuarto de la criada.  

Su trama se desata cuando la protagonista se come el insecto: “¿Existo? ¿Es ésta la intensidad que me lo puede comprobar? Si al menos encontrase a otra, ya que no me encuentro a mí misma…”.

5.- Transformará tu vida
En definitiva, la buena literatura es una exposición sobre la visión de otras vidas, que cambiará tu propia perspectiva sobre tomas vitales.

Esta lectura ayudará a conocerte mejor. "No se equivoquen: la sencillez sólo se logra a través del trabajo duro", escribió en La pasión según GH. 

Fuente de video: Canal PerúCultural en youtube 
https://www.youtube.com/channel/UCam
Fuente de texto : 
https://www.telesurtv.net/news/clarice-lispector-literatura--20181210-0015.html

Elena Poniatowska - El recado-relato en su voz

Elena Poniatowska - El recado

Relato en su voz



El recado, un cuento de Elena Poniatowska


Vine Martín, y no estás. Me he sentado en el peldaño de tu casa, recargada en tu puerta y pienso que en algún lugar de la ciudad, por una onda que cruza el aire, debes intuir que aquí estoy. Es este tu pedacito de jardín; tu mimosa se inclina hacia afuera y los niños al pasar le arrancan las ramas más accesibles… En la tierra, sembradas alrededor del muro, muy rectilíneas y serias veo unas flores que tienen hojas como espadas. Son azul marino, parecen soldados. Son muy graves, muy honestas. Tú también eres un soldado. Marchas por la vida, uno, dos, uno, dos… Todo tu jardín es sólido, es como tú, tiene una reciedumbre que inspira confianza.


"A veces quisiera ser más vieja porque la juventud lleva en sí, la imperiosa, la implacable necesidad de relacionarlo todo con el amor"
Aquí estoy contra el muro de tu casa, así como estoy a veces contra el muro de tu espalda. El sol da también contra el vidrio de tus ventanas y poco a poco se debilita porque ya es tarde. El cielo enrojecido ha calentado tu madreselva y su olor se vuelve aún más penetrante. Es el atardecer. El día va a decaer. Tu vecina pasa. No sé si me habrá visto. Va a regar su pedazo de jardín. Recuerdo que ella te trae una sopa cuando estás enfermo y que su hija te pone inyecciones… Pienso en ti muy despacio, com si te dibujara dentro de mí y quedaras allí grabado. Quisiera tener la certeza de que te voy a ver mañana y pasado mañana y siempre en una cadena ininterrumpida de días; que podré mirarte lentamente aunque ya me sé cada rinconcito de tu rostro; que nada entre nosotros ha sido provisional o un accidente.

Estoy inclinada ante una hoja de papel y te escribo todo esto y pienso que ahora, en alguna cuadra donde camines apresurado, decidido como sueles hacerlo, en alguna de esas calles por donde te imagino siempre: Donceles y Cinco de Febrero o Venustiano Carranza, en alguna de esas banquetas grises y monocordes rotas sólo por el remolino de gente que va a tomar el camión, has de saber dentro de tí que te espero. Vine nada más a decirte que te quiero y como no estás te lo escribo. Ya casi no puedo escribir porque ya se fue el sol y no sé bien a bien lo que te pongo. Afuera pasan más niños, corriendo. Y una señora con una olla advierte irritada: “No me sacudas la mano porque voy a tirar la leche…” Y dejo este lápiz, Martín, y dejo la hoja rayada y dejo que mis brazos cuelguen inútilmente a lo largo de mi cuerpo y te espero. Pienso que te hubiera querido abrazar. A veces quisiera ser más vieja porque la juventud lleva en sí, la imperiosa, la implacable necesidad de relacionarlo todo con el amor.


"Sé que todas las mujeres aguardan. Aguardan la vida futura, todas esas imágenes forjadas en la soledad, todo ese bosque que camina hacia ellas"
Ladra un perro; ladra agresivamente. Creo que es hora de irme. Dentro de poco vendrá la vecina a prender la luz de tu casa; ella tiene llave y encenderá el foco de la recámara que da hacia afuera porque en esta colonia asaltan mucho, roban mucho. A los pobres les roban mucho; los pobres se roban entre sí… Sabes, desde mi infancia me he sentado así a esperar, siempre fui dócil, porque te esperaba. Sé que todas las mujeres aguardan. Aguardan la vida futura, todas esas imágenes forjadas en la soledad, todo ese bosque que camina hacia ellas; toda esa inmensa promesa que es el hombre; una granada que de pronto se abre y muestra sus granos rojos, lustrosos; una granada como una boca pulposa de mil gajos. Más tarde esas horas vividas en la imaginación, hechas horas reales, tendrán que cobrar peso y tamaño y crudeza. Todos estamos –oh mi amor– tan llenos de retratos interiores, tan llenos de paisajes no vividos.


Ha caído la noche y ya y casi no veo lo que estoy borroneando en la hoja rayada. Ya no percibo las letras. Allí donde no le entiendas en los espacios blancos, en los huecos, pon: “Te quiero…” No sé si voy a echar esta hoja debajo de la puerta, no sé. Me has dado un tal respeto de ti mismo… Quizá ahora que me vaya, sólo pase a pedirle a la vecina que te dé el recado: que te diga que vine.

Para conocer sobre la vida y obra de la escritora ir a la web : 



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